Mosquera siempre fue opción, y aún lo es.

Mosquera pudo llegar tras la salida de Sanguinetti.

Mosquera siempre fue opción, y aún lo es.

Foto: Líbero.

Roberto Mosquera es hoy por hoy el mejor estratega nacional, ¿qué equipo no lo querría para que sea su DT?. Alianza Lima se interesó por él desde la salida de Guillermo Sanguinetti y pese a que el actual orientador técnico del Juan Aurich tenía Cláusula de salida, no se llegó a un acuerdo económico y su llegada a Matute se frustró.

Lo que no se rompió fue la buena relación entre los intermediarios aliancistas y Mosquera pues las conversaciones siguieron. Los dirigentes victorianos idearon un plan para que lo ejecute Mosquera desde 2016, le devuelva el estilo tradicional a Alianza y supervise las divisiones menores para que todos los equipos jueguen a lo mismo en planteamiento y filosofía fútbolística.

La traba hasta el momento sigue siendo el tema económico. Esto motivó a que miembros de la comisión de fútbol empiecen a proponer nombres y gestionar entrevistas con técnicos como Rafo Castillo, Wilmar Valencia o Julio César Uribe, para apelar al 'plan b' en caso lo de Mosquera se vuelva a caer.

Sin embargo Alianza tiene una última carta por jugar. Mosquera en estos momentos está incómodo porque Aurich no le propone renovar y él ya quiere empezar a trabajar con miras al próximo año, hacer su equipo y si el tiempo sigue pasando quizá todos los jugadores ya hayan cerrado con otros conjuntos. La dirigencia aliancista puede aprovechar la coyuntura y convencer a Mosquera pese a que la oferta económica no sea la más alta.